martes, 21 de diciembre de 2010

FELIZ NAVIDAD


Que como estos ángeles adoran al Niño, estas Navidades sepamos hacerle un hueco en nuestros corazones.
PASAD UNAS FELICÍSIMAS FIESTAS.
DESCANSAD TODO LO QUE PODÁIS.
TRATAD BIEN VUESTROS FOGONES QUE SON PARTE IMPORTANTE DE ESTOS DÍAS.
CUIDAD A LOS VUESTROS Y A LOS QUE YA NO ESTÁN MANTENEDLOS VIVOS EN VUESTRO CORAZÓN.
FELICES FIESTAS A TODOS.
UN CÁLIDO ABRAZO.
ALICIA.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

COCIDO MONTAÑÉS Y UN AÑO DE BLOG



Cuando publiqué la primera receta no sabía si las cosas iban a funcionar, si sería capaz de tener platos suficientes para poder publicar al menos uno a la semana y si a alguien le gustaría mi forma de cocinar, las fotos y las recetas.
Después de un año no sólo el blog ha funcionado y aquí seguimos los dos, si no que además he hecho buen@s amig@s, en algunos casos en la misma provincia, en otros cercanos, aquí en España y en otros hasta al otro lado del charco.

Hoy quiero agradeceros a todos el haber permanecido aquí, fieles durante todo el año, ha sido muy importante para mi acercarme a vuestras cocinas y leer vuestros comentarios de ánimo.

Los que nunca decís nada pero se que habéis hecho algunas de mis recetas muchas gracias por vuestro apoyo silencioso y espero que continuéis visitando este puchero durante mucho, mucho tiempo.


Para celebrar mi primer año quiero compartir con vosotros una de las recetas más emblemáticas de la cocina cántabra, el cocido montañés.


Como habéis podido ver en la foto es un plato con enjundia, alubias, tocino, costilla... Generalmente se hace con berza que le da un sabor intenso difícil de olvidar. El de la foto está hecho con repollo, la berza que encontré tenía el aspecto de llevar varios días saludando a los clientes y a mí no me convenció y lo preparé con repollo que es como lo hacen en Limpias, así que mi cocido es un cocido de Limpias, un pueblecito de Cantabria donde hay un Cristo muy famoso que se dice que lloró sangre.


La receta que os presento es la de mi madre, pero si en alguna ocasión tenéis en vuestras manos un libro de cocina cántabra vereis que se le puede añadir oreja de cerdo, hueso de jamón..., cada cual apaña su cocido a sus gustos y posibilidades. Eso si, es un plato contundente, sirve de comida y cena, por que a la hora de cenar no hay hambre.


Un consejo, dejadlo reposar de un día para otro ya que esas horas de reposo sirven para potenciar su sabor.


¿Estáis preparados?


NECESITAMOS: para comer dos días cuatro personas de buen diente.


- 500gr. de alubias blancas (suelo comprar las de León).

- 750 gr. de costilla adobada.

- 300 gr. de tocino ibérico.

- 300 gr. de tocino fresco con hebra.

- Dos choricitos de guisar.

- Una morcilla de Burgos.

- Una patata mediana.

- Berza o repollo.



LO HACEMOS:


Dejamos el día anterior las alubias a remojo.


En una olla grande ponemos las alubias ya remojadas, el tocino ibérico y el fresco, la costilla partida en trozos y el chorizo de guisar. Cubrimos con agua, unos cinco centímetro por encima de las alubias y las tajadas y dejamos al fuego.

Cuando el agua rompa a hervir espumamos y rompemos el hervor en tres ocasiones con un poco de agua fría. Volvemos a espumar si es necesario y dejamos cocer a fuego suave. Si necesitáramos añadir agua, ésta tiene que ser caliente y echarla poco a poco para que no se corte el hervor.


Mientras tanto vamos partiendo el repollo o la berza en juliana, lavamos y reservamos.

Cuando veamos que las alubias están blandas pero aún no cocidas, no puedo precisaros el tiempo ya que eso depende de la alubia y el agua que uséis, que calculemos que les falten unos veinte o veinticinco minutos, añadimos el repollo o berza y la patata y dejamos cocer.

Pasado este tiempo tanto el repollo o berza, la patata y las alubias estarán hechos. Es el momento de añadir la sal.


Tras añadir la sal incorporamos a nuestro cocido la morcilla, que habremos pinchado antes para romper un poco la piel y que no se reviente al meterla en la olla caliente y nos estropee el cocido.


Dejamos la olla al fuego unos cinco minutos para que se cueza la morcilla y apagamos.


Dejamos reposar hasta el día siguiente.


Se puede servir primero las alubias y luego las tajadas o todo junto como en la foto. Eso a vuestro gusto.


No olvidéis comprar un buen pan para mojar.


Un beso a todos.

jueves, 9 de diciembre de 2010

SOLOMILLO DE CERDO EN HOJALDRE Y COMPOTA DE MANZANA


Por fin he conseguido un hueco en el ordenador, desde que comenzó el puente mi marido tomó posiciones y no lo ha soltado durante el poco tiempo que hemos estado en casa. Espero ponerme al día con vuestras recetas a partir de mañana.
Este solomillo de cerdo en hojaldre adorna la mesa navideña en mi casa desde que volvimos a Santander. La cena de Nochebuena y la comida de Navidad se hacen en casa. Se trata de un plato sin complicaciones pero con un corte y un sabor dignos de cualquier evento familiar que se precie. Además les gusta a todos, nietos, padres, tía y abuelos.
La compota de manzanas reinetas le aporta un agridulce que aún potencia más su sabor.
Es importante elegir para envolver el solomillo un bacon ahumado bueno y una mostaza que le de sabor pero no prevalezca por encima del resto de los ingredientes. Para este caso utiliza la de Dijon o la mostaza verde, esta tiene un ligero picor muy agradable al paladar.
Vamos a empezar que me está entrando un hambre....
NECESITAMOS:
Para 8-9 personas
- Dos placas de masa de hojaldre. Yo compro la de Lidt.
- Dos solomillos de cerdo.
- Doce lonchas de bacon ahumado.
- Mostaza de Dijon o mostaza verde.
- Tres cebollas medianas por solomillo. Si los guisamos juntos bastará con cinco.
- Medio vaso de vino blanco bueno.
- Aceite.
- Sal y pimienta blanca molida.
- La yema de una huevo.
- Seis manzanas reinetas.
- Una cucharada de azúcar.
- Un chorrito de agua.

LO HACEMOS:

Picamos la cebolla en aros finos. En una cazuela ponemos un chorrito de aceite, la cebolla y los solomillos salpimentados. Bajamos el fuego y tapamos para que la cebolla sude y los solomillos se vayan haciendo con el líquido que sueltan.

Cuando la cebolla comience a pocharse añadimos medio vaso de vino de vino blanco y dejamos que los solomillos y la cebolla terminen de guisarse. El solomillo debe quedar tierno pero sin romperse. Dejamos enfriar.

Cuando la cebolla esté fría extendemos la placa de hojaldre y calculamos el que necesitaremos para envolver uno de los solomillos. Con lo que sobra se hace el adorno final.

En el centro del hojaldre ponemos la cebolla de arriba a abajo. Ésta será la cama donde pondremos nuestro solomillo.

Pasamos el bacon por la sarten sin que se dore, simplemente que suelte algo de grasa y lo colocamos extendido sobre la cebolla. Pincelamos el solomillo con una capa muy sutil de mostaza y lo situamos sobre el bacon.

Con mucho cuidado enrrollamos el bacon sobre el solomillo y cerramos el hojaldre. Lo adornamos como más nos guste.

Precalentamos el horno a 220 y pincelamos el hojaldre con la yema de huevo. Volvemos a repetir la operación cuando lo vayamos a meter al horno cuya temperatura habremos bajado a 200º. Dejamos en el horno sobre veinte minutos, hasta que esté dorado y lo sacamos.

Una vez frío el hojaldre podemos partirlo.

Para la compota de manzana pelaremos y partiremos las manzanas en trocitos pequeños. Las ponemos en un cazo pequeño con un poco de agua y una cucharada de azúcar, las tapamos y dejamos cocer a fuego lento hasta que se ablanden, después según nos guste se pueden dejar así o machacarlas con un tenedor hasta hacer una especie de puré.

Servimos el solomillo acompañado de la compota.

Ya sabéis que se come en mi casa el día de Navidad, espero que os guste y os aporte alguna idea para vuestras fiestas.


jueves, 2 de diciembre de 2010

POTAGE CRESSONNIÈRE


Que bien queda una entrada en francés hasta parece que se hacer platos de alta cocina. Lo que veis en el plato no es ni más ni menos que una humilde aunque sabrosísima sopa de berros.
Esta Semana Santa compramos varios libros de cocina y entre ellos uno más de cocina francesa. Es diferente a los que ya tenemos puesto que nos habla sobre los productos típicos de cada zona, sus platos más representativos o los restaurante y lugares donde podemos encontrar la mejor cocina francesa.
El libro se llama Culinaria Francia y está editado por h.f.ullmann.
Estos días que hace tanto frío y que apetecen los platos de cuchara aquí tenemos uno fácil de hacer y de sabrosos resultados.
NECESITAMOS:
- 400gr. de patatas.
- Litro y medio de agua.
- Un manojo de berros.
- 100 ml de nata líquida.
- Pimienta recién molida.
- Sal.
LO HACEMOS:
Pelamos las patatas, las lavamos y las cortamos en cubos.
Ponemos las patatas a cocer en el agua con sal durante media hora.
Mientras las patatas se cuecen limpiamos los berros y les quitamos los tallos. Reservamos los más pequeños para adornar el plato.
A la media hora de cocción de las patatas añadimos los berros y dejamos cocer otros quince minutos.
Pasado este tiempo trituramos las patatas y los berros hasta conseguir un puré fino. Añadimos la nata, mezclamos y salpimentamos.
Al servir la sopa adornamos el plato con los berros reservados.
Espero que esta sopa os ayude a calentaros un poquito.

viernes, 26 de noviembre de 2010

TOMATES RELLENOS TURCOS



No se si recordaréis que hace un tiempo mis queridos sufridores de abajo, mis vecinos Tere y Modesto, me regalaron unas hortalizas, entre ellas estos tomates. Uno de ellos era enorme, el padre de todos los tomates, los demás eran de tamaño mediano y pequeño.

Pensando que podría hacer con ellos me acordé de una receta que había visto en el libro de recetas turca, aquél que compro mi marido en el Media Markt, ¿os acordáis?. ¡Qué memoria tenéis!.

Desde luego los tomates estaban en su punto para la receta maduros y consistentes para soportar el vaciado que les tenía que hacer.

El que más me gustaba era el grande, una vez relleno quedaría como una pequeña cazuela, pero si os decidís a hacer la receta os aconsejo que compréis tomates medianos. Mi tomatazo se ladeaba y se rompió en el último momento al sacarlo de la cazuela donde hay que hervirlos, así que compradlos medianos, maduros y prietos de carnes.

Pues manos a la obra....

NECESITAMOS: para cuatro personas.

- Dos tomates por persona.
- Aceite de oliva.
- Una cebolla y un cuarto para ocho tomates.
- Unos treinta y cinco gramos de arroz de grano largo lavado y escurrido.
- 175ml de agua.
- 225gr. de carne picada de buey o cordero (yo usé de mezcla de cerdo y ternera, a mi marido no le gusta el cordero.
- Dos cucharadas y media de eneldo picado.
- Sal.
- Pimienta.

LO HACEMOS:

Abrimos los tomates por la parte superior y la reservamos ya que nos servirá de tapa. Extraemos la pulpa del tomate y la ponemos en un bol.
Para preparar el relleno picamos la cebolla en aros finos y la sofreímos en una cazuela durante 5 minutos a fuego fuerte, hasta que esté tierna y haya tomado color.
En este momento incorporamos el arroz y lo removemos para que se impregne con el aceite. Añadimos el agua, bajamos el fuego a la mitad y tapamos la cazuela. Dejamos cocer el arroz unos 10 minutos, hasta que haya absorbido todo el agua.
Una vez listo el arroz retiramos la cazuela del fuego, le agregamos la carne picada, el eneldo, la sal y la pimienta y mezclamos bien. Picamos la pulpa del tomate reservada y la añadimos a la mezcla. Volvemos a mezclar.
Repartimos el relleno entre los tomates y los tapamos con la parte superior que habíamos reservado. Los disponemos en una cazuela suficientemente amplia como para que quepan todos sin superponerse.
Mezclamos el aceite con el agua y la sal y lo vertemos alrededor de los tomates. Tapamos la cazuela y dejamos que cuezan a fuego medio unos treinta minutos, hasta que estén tiernos.
Una vez cocidos los pasamos a una fuente y los adornamos con unas ramitas de eneldo.

FELIZ Y "CALUROSO" FIN DE SEMANA A TODOS.

martes, 16 de noviembre de 2010

CATAPLANA DE ALMÊIJOAS


En las tierras del norte lleva más de una semana lloviendo sin parar. La semana anterior tuvimos viento y lluvia; esta sólo lluvia.
Se que los días de lluvia son muy románticos, que es buena para los campos y el suministro acuífero para el verano, pero en estos días tan tristes me entran unas ganas de ver el sol y sentirme en verano que he decidido viajar, por lo menos gastronómicamente hablando, al Algarve portugués, sito en el extremo sur de Portugal y que debe su nombre ni más ni menos que a su herencia musulmana. Al gharb quiere decir el jardín de Occidente.
La gastronomía portuguesa está íntimamente ligada a la española, no en vano sufrimos las mismas invasiones y comenzamos la carrera colonizadora de las Indias al unísono. De los diferentes pueblos con los que tuvimos relación recogimos y fusionamos a nuestra cultura tanto usos y costumbres como sus formas de vida entendiendo entre éstas su gastronomía, enriqueciendo nuestra cultura.
El plato que os presento son unas riquísimas almejas guisadas de forma muy especial. Si aquí en el norte son más que conocidas las almejas a la marinera, en esta zona de Portugal se guisan de manera contundente, con jamón y chorizo. La primera vez que las pruebas es inevitable pensar que a ti eso no te va a gustar tanto como las almejas de tu tierra, pero una vez que comes la primera y mojas un poco de pan en la salsa la cosa cambia y se convierten en uno de los platos que incorporas a tus menús cuando tienes invitados y quieres sorprenderles.
Otra de las peculiaridades de este plato es la cazuela donde se guisan, la cataplana, que es una cazuela baja de cobre y con tapa. Evidentemente yo no la tengo pero puedo decir que el resultado es extraordinario hechas en una cazuela normal tapadas o en la de barro también tapadas. Se podrían hacer en la olla express pero yo no he probado.
La receta está sacada del libro número 23 de Cocinas del Mundo editados por el periódico El Mundo.
NECESITAMOS:
- Un kilo de almejas.
- Una cebolla.
- 2 dientes de ajo.
- 1 pimiento rojo.
- 1 hoja de laurel.
- 1/2 cucharadita de pimentón dulce.
- 100 gr. de chorizo (que no sea malo).
- 100 gr. de jamón serrano (que no sea malo).
- Una cucharada de mantequilla o margarina).
- 1/2 tacita de vino blanco.
- Zumo de un limón.
- Cilantro.
- Sal.
- Pimienta negra molida.
- Aceite.
LO HACEMOS:
Lo primero que debemos hacer es purgar las almejas. Esto consiste en poner las almejas en agua con sal y dejar que expulsen toda la arena y suciedad que tengan. El agua hay que cambiarla varias veces y ponerla nueva con sal. Al volver a meter las almejas en el agua hay que lavarlas bien para que no lleven pegada ninguna suciedad.
Una vez purgadas las almejas las ponemos bien lavadas en agua limpia con sal y las reservamos.
Picamos la cebolla y el ajo, lavamos el pimiento, le quitamos las pepitas y le cortamos en tiras.
En la cazuela que hayamos elegido ponemos la cucharada de mantequilla y un chorrito de aceite y lo calentamos. Cuando empiece a coger calor le incorporamos la cebolla, el ajo y el pimiento y dejamos que se poche lentamente.
Mientras, picamos el jamón en dados y el chorizo en rodajas (yo lo pico también en dados).
Cuando la cebolla, el ajo y el pimiento estén casi hechos añadimos el pimentón y lo movemos para que no se queme, el laurel, la pimienta, el cilantro picado y el vino blanco.
Lo dejamos rehogar y añadimos un poco de sal (tenemos en cuenta que el jamón ya lleva), el chorizo y el jamón y cuando empiecen a tomar color, las almejas. Tapamos y esperamos a que se abran las almejas.
Cuando se hayan abierto todas las almejas rociamos el plato con el zumo de limón.
Si alguna de las almejas no se abriera sacarla del guiso, ya que es posible que tenga arena y por eso no se abra, no hay que intentar abrirla en la cazuela por que podemos estropear todo el trabajo.
Si optamos por hacer las almejas en la olla express ponemos todos los ingredientes en la olla salvo el zumo de limón. Tapamos y esperamos diez minutos una vez que suba la válvula.
Al abrir la olla rociamos las almejas con el zumo de limón.
¿Os apetece una excursión por el Algarve?....

viernes, 12 de noviembre de 2010

BROWNIE DE GALLETAS Y LACASITOS




La foto no le hace justicia a este brownie de galletas María y lacasitos, pero os puedo asegurar que está de muerte, gran parte me la comí yo, lo admito.


Hace unas semanas mi hija lo probó, lo había hecho una amiga de unas recetas que le había mandado hace ya tiempo, y vino a casa pidiéndome que lo hiciera. Así que como el domingo por aquí ya empezaron la lluvia y el viento de esta semana me metí en la cocina y salió esta gloria.


El molde que utilicé es bastante grande, una bandeja de pirex de 30 por 24 cm, no quedó muy alto pero no tengo otro donde me cupiera tal cantidad de chocolate.



¿Conocéis los pasteles de carne?, esos que se hacían de restos de pasteles y luego se bañaban con una generosa capa de chocolate. La textura y el gusto de este brownie recuerdan muchísimo a ellos, y a mí me encantaban, ahora ya no los hacen.



Si más preámbulos vamos al grano:



NECESITAMOS:



- 225 gr. de galletas María.


- 225gr. de mantequilla.


-200 gr. de chocolate negro rallado.



- 150 ml de agua.



- 300 gr. de harina de repostería.



- 275 gr. de azúcar.



- 150 ml. de nata para montar.



- 2 huevos batidos.



- 4 cucharadas de leche.



- Lacasitos.



- 4 cucharaditas de café de esencia de vainilla (yo no le puse).



Para la cobertura (sobrará):



- 200 gr. de chocolate negro.



- 6 cucharadas de agua.



- 3 cucharadas de nata líquida para montar.



- 100 gr. de mantequilla.



LO HACEMOS:


Precalentamos el horno a 190º.


Engrasamos y espolvoreamos con harina el molde donde vayamos a hacer el brownie. Yo usé un papel de horno.


En una cazuela pequeña ponemos el chocolate rallado con el agua, la nata y la mantequilla, lo derretimos hasta que se mezclen todos los ingredientes.


En un bol tamizamos la harina y añadimos el azúcar. Incorporamos el chocolate derretido. Mezclamos bien el chocolate con la harina y el azúcar y añadimos los huevos y la esencia de vainilla (yo no la puse). Mezclamos.


Partimos las galletas con la mano en trozos desiguales y más bien grandes y reservamos.


Vertemos la mezcla en el molde e incorporamos los trozos de chocolate repartidos por toda la masa.


Ponemos el brownie en el horno durante 20 minutos. Pasados éstos pinchamos para ver si ya está cuajado.


Dejamos enfriar el brownie y lo desmoldamos.


Preparamos la cobertura:


Ponemos el chocolate, la nata, el agua y la mantequilla a calentar hasta que se mezclen y formen un chocolate un poco espeso. Dejamos enfriar.


Cuando hayamos desmoldado el brownie le ponemos la cobertura por encima con una espátula y una vez que esté templada metemos el bizcocho en la nevera dejándolo enfriar hasta que se puedan poner sobre ella los lacasitos sin que se fundan.


Adornamos con los lacasitos y preparamos el cuchillo para partirlo. Para entonces los niños, grandes y pequeños, estarán deseando comer un trozo cuanto más grande mejor.


miércoles, 3 de noviembre de 2010

CERDO CON MIEL Y OREJONES DE ALBARICOQUE


Lo que más me gusta de tener el blog no es el publicar mis recetas, ya véis que a veces no subo ni una por semana, sino el ver las vuestras, sois mi gran libro de cocina. Un libro que contínuamente se está actualizando, aportándome ideas, sugerencias, trucos, consejos y muchas, muchísimas recetas para poner en la mesa el plato que más pueda sorprender a los míos.

Me gusta hacer vuestras recetas y espero poder ir publicándolas todas poco a poco, como es el caso de la de hoy. Se trata de una receta del blog de Juana, la cocina de Babel.
La receta original lleva cordero y como a mi marido no le gusta lo sustituí por cerdo, que aunque un árabe nunca lo comería, a mi marido del cerdo le gustan hasta los andares.

Es un plato especiado y con un agradable sabor a canela y almendra.


NECESITAMOS:

- 650 gr. de carne de cerdo para guisar.
- 30 gr. de mantequilla.
- Una cucharadita de canela molida.
- Una cucharadita de jegibre molido.
- Pimienta negra recién molida.
- Una pizca de cayena.
- Media cebolla cortada en rodajas.
- 350ml. de caldo de pollo o verduras.
- Un manojito de cilantro atado con hilo de algodón, como un bouquet.
- 150gr. de orejones.
- Cuatro cucharadas de miel.
- Almendras fileteadas.
- Una taza de sémola.
- Una taza de agua.

LO HACEMOS:
Partimos la carne en dados. En una cazuela en la que quepa la carne derretimos la mantequilla, añadimos las especias y las sofreímos con cuidado para que no se quemen.
Incorporamos el cerdo a la cazuela y dejamos que se dore. Añadimos la cebolla, el caldo y el atadillo de cilantro.
Dejamos que el conjunto se guise a fuego muy lento durante al menos cuarenta y cinco minutos. Pasado este tiempo incorporamos la miel y los orejones y lo mantenemos un cuarto de hora más a fuego lento, hasta que el cerdo esté muy tierno. Retiramos el atadillo de cilantro.
Preparamos el cus-cús. Ponemos el agua a hervir con un chorrito de aceite y sal. Cuando hierva añadimos la sémola y lo dejamos reposar hasta que haya absorbido todo el agua. Separamos los granos de sémola con un tenedor.
Presentamos el plato con la sémola debajo y el cerdo encima adornado con las almendras fileteadas.














jueves, 28 de octubre de 2010

PINCHOS RIOJANOS 1


Aprovechando que este mes era nuestro aniversario de boda mi marido y yo nos escapamos fugazmente a la Rioja, a Haro un pueblecito donde se bebe un cosechero magnífico y se toman unos pinchos inolvidables.
Conocíamos Haro desde hace mucho tiempo. Era escapada obligatoria durante los meses que vivimos en Burgos y los años que lo hicimos en Pamplona. Desde que regresamos a Santander no habíamos vuelto y la idea fue fantástica. Lo pasamos estupendamente y bebimos y comimos muchas cosas muy ricas. Además fuimos solos, sin niños que estuvieran quejándose de "a un bar", "a ver piedras", por que la tarde la dedicamos a ver Pancorbo, en la provincia de Burgos, y Laguardia, en la de Alava. La mañana del domingo estuvimos en Briones donde hay un museo del vino que no nos dió tiempo a visitar.
Previniendo que luego podría no recordar ningún pincho me llevé un cuadernito y a la salida de cada bar apuntaba los que acabábamos de comer y alguno que me llamara la atención.
En Haro el pincho estrella es el pimiento relleno dulce o picante de carne o setas. Los picantes son para paladares acostumbrados, pican que emocionan.
De esta vez además de pimientos encontré en las barras algunas lindezas inigualables que poco a poco iré compartiendo con vosotros.
El pincho de hoy está algo cambiado. Ya sabéis que mi marido está a régimen y procuro quitar de los platos los fritos, rebozados y empanados. En este pincho el tomate va rebozado. Por lo demás todo tal cual.
NECESITAMOS:
- Un tomate maduro y firme.
- Jamón serrano.
- Langostinos cocidos.
- Unas rebanadas de pan.
- Alioli (mejor casero).
Para el alioli: un diente de ajo, un huevo, aceite y sal.
LO HACEMOS:
Tostamos las rebanadas de pan en una sartén muy caliente por una de las caras.
Cortamos el tomate en círculo y lo ponemos encima del pan (los que queráis la receta original rebozad el tomate).
Sobre el tomate colocaremos un trozo de jamón serrano y coronaremos nuestro pincho con un langostino cocido y un poco de alioli.
Para los que decidáis hacer el alioli, yo lo hice como una mayonesa sólo que con ajo. En el vaso de la batidora ponéis el ajo pelado, el huevo, la sal y un poco de aceite. Lo batís cuidadosamente y cuando vaya espesando añadís aceite hasta que tengáis la cantidad necesaria. Corregís de sal y ya está hecho.

domingo, 24 de octubre de 2010

CROQUETAS DE POLLO TURCAS



Siento muchísimo no haber publicado nada esta semana, no he tenido tiempo material de nada, casi ni de ir a veros a vuestras cocinas. Ha sido una semana muy intensa con mucho ajetreo y muy poco tiempo para estar en casa, y el poquísimo que había era para planchar, limpiar.... qué os voy a contar que no sepáis.

La receta de hoy es turca. Este verano mi marido compro un libro de cocina turca en un lugar tan extraño como el Media Markt, ese de "yo no soy tonto". El libro se llama Cocina turca. Más de 100 irresistibles recetas y es de la editorial Parragon. Lo cierto es que está muy bien, tiene unas excelentes fotos y las recetas son claras. De las que ya he hecho no sobran ni faltan ingredientes como le ha pasado a Juana en su libro de recetas suecas.
Estas croquetas no se parecen en nada, salvo el nombre, a las que estamos acostumbrados a comer. Son compactas y al primer bocado apenas tienen sabor, o eso nos pareció a mi marido y a mí, así que decidimos ponerle un poquito de limón como aconseja la receta y la cosa cambió, adquiriendo un regustillo muy especial. No os cuento más por que si no ya no las hacéis y creo que merece la pena el esfuerzo. Se hacen rápido y se comen antes.

NECESITAMOS:

- Dos rebanadas de pan grande sin corteza, (yo usé dos trozos de pan del día anterior).

- Leche para remojar el pan.

- 2 pechugas de pollo deshuesadas, cocidas y sin piel.

- Un huevo.

- Una pizca de cúrcuma.

- El zumo de medio limón.

- Harina.

- Aceite.

-Sal. y pimienta.

LO HACEMOS:

Ponemos el pan en un plato hondo y lo remojamos con la leche durante cinco minutos. Escurrimos el exceso de leche, desmigamos el pan y lo reservamos.

Picamos las pechugas con un robot de cocina o la picadora de la batidora. Las llevamos a un cuenco y les añadimos el pan, el huevo batido, la sal, la pimienta y la cúrcuma. Lo amasamos bien y formamos una bolas de aproximadamente 1 cm de diámetro.

En una sartén ponemos a calentar aceite suficiente para freír las bolas que hemos hecho. Enharinamos las croquetas y las freímos hasta que queden doradas.

Podemos servirlas frías o calientes rociadas con el zumo de limón.

Si estáis dispuestos a viajar a otros países tenéis la puerta abierta....

domingo, 17 de octubre de 2010

HOJALDRES DE CHOCOLATE Y MERMELADA





Hace unos meses Carlos Dube, del Mercado Calabajío, publicó unos hojaldres del tipo de los de Astorga, ya sabéis esos que llevan miel y están tan riquísimos. El hecho es que me encantan y hacía años que no los comía y me decidí a hacerlos.


Todo fue extraordinariamente bien hasta que tocó hacer el almíbar que se me convirtió en caramelo. Ricos estaban pero mejor para chuparlos que para comer.


Mi idea era hacer estos hojaldres para una merienda a la que había que llevar el traje,..yo traje esto, tu lo otro... os hacéis a la idea. Como no me salieron y tenía la placa de hojaldre en casa pensé que podía montar los hojaldres y rellenarlos con algo que les gustara a los niños; por su puesto de chocolate, ¡como no!. Además les añadí un poco de mermelada de fresa para que el sabor contrastara un poco.


NECESITAMOS:


- Una placa de hojaldre. Yo compro el de Lidl.

- Chocolate para fundir.

- Mermelada de fresa.

- La yema de un huevo.

- Un descorazonador de manzanas.
LO HACEMOS:

Encendemos el horno y lo ponemos a 175º, arriba y abajo.

Estiramos la placa de hojaldre y con un metro y un cuchillo afilado o un cortapizzas la marcamos y dividimos en cuadrados iguales.

Montamos los hojaldres. Cada hojaldre lleva dos cuadrados de masa. Al que va a ir arriba le hacemos con el descorazonador de manzanas un agujero en el medio y guardamos el circulito de hojaldre que hemos quitado. Una vez hecho el agujero montamos la placa agujereada sobre entera y pintamos con la yema de huevo batida. Ya tenemos un hojaldre. Repetimos la misma operación con los demás. Y los vamos poniendo en un papel de horno o en una bandeja para el horno untada con un poco de mantequilla para que no se peguen. Yo no me complico mucho, la masa de Lidl viene enrollada en un papel de horno y lo dejo en ella tal cual.

Los metemos en el horno precalentado junto con los circulitos que hemos quitado a la parte de arriba, también pintados con el huevo, durante unos quince minutos. Ya sabéis que este tiempo es una orientación. Vigiladlos por que como son muy pequeños enseguida se queman.

Sacamos del horno y los dejamos enfriar.

Mientras, derretimos el chocolate como más nos guste, con leche o con agua, y lo dejamos espesito.

Una vez fríos los hojaldres rellenamos con una cucharadita de fresa abajo y el chocolate por encima. Ponemos el sombrero y ya los tenemos listos para comer.

Seguro que tenéis que comer más de uno.



domingo, 10 de octubre de 2010

LACITOS CON SALSA FIORENTINA



No lo miréis con esa cara que os estoy viendo. Si tiene un color poco habitual pero es una salsa suave y delicada de las de empezar y no parar.
Hace muchos, muchos años, a lo mejor dieciocho o alguno más, había en Salamanca (la familia de mi marido es de allí) en una calle perdida y muy escondido un restaurante italiano muy pequeño, el Bella Blue. Allí comimos pizzas excelentes, pasteles salados de queso, gambas y espinacas, pastas en degustación con diferentes tipos de salsas, entre ellas esta fiorentina.
Una de las veces que volvimos a Salamanca fuimos allí y ya no estaba, lo habían cerrado. Nos resignamos, son cosas que pasan. Al cabo de un tiempo mirando en la guía de teléfonos restaurantes para ver donde íbamos a cenar lo encontré, había cambiado de sitio.
Si no lo han cerrado definitivamente ahora se encuentra en la plaza donde está la librería Cervantes, creo que es la de Santa Úrsula, en una de las bocacalles, junto a un hotel.
Allí fuimos pensando en deleitarnos con una cena estupenda y cual fue nuestro chasco cuando vimos un local grande, oscuro, que cenamos por que sabemos donde tenemos la boca y la calidad, ya no tenía nada que ver con la del local pequeño.
Decidieron sacarle partido al negocio y lo estropearon. Desde luego el restaurante no estaba vacío, pero por la edad de los chicos que llenaban las mesas no habían conocido el anterior.
Aún así conservo como recuerdo de aquel tiempo la receta de la salsa fiorentina que el dueño fue tan amable de darnos un día.
NECESITAMOS:
- 250 gr. de lacitos (yo compro los de Barilla).
- 1/2 lombarda pequeña.
- Un brick pequeño de nata para cocinar.
- Vinagre.
- Sal.
- Un poquito de emmental rallado.
LO HACEMOS:
Picamos la lombarda y la cocemos con un poquito de vinagre. Es muy importante no abusar del vinagre, nos estropeará el plato al avinagrar la lombarda y no hay manera de quitarlo.
Una vez cocida y escurrida separamos un poco para mezclar con la salsa y el resto lo pasamos por la batidora con un poco de nata.
En un cazo ponemos la lombarda batida y añadimos poco a poco la nata y una pizca de queso rallado hasta obtener la textura deseada, más bien espesa. Si nos quedara un poco líquida podemos ponerle más queso para que espese, pero se perderá parte del sabor de la salsa ya que inevitablemente nos sabrá a queso. Corregimos la sal, añadimos la lombarda picada y reservamos.
Cocemos la pasta como indica el paquete, la escurrimos y aderezamos con la salsa que hemos preparado.
Pues ya podéis poner la mesa y disfrutar por que es una salsa....

miércoles, 6 de octubre de 2010

SALMÓN EN CAMISA



Veréis, una amiga de mi hija de diez años se ha hecho seguidora del blog y le prometí que esta semana iba a publicar una receta fácil que ella pudiera hacer sin mucha ayuda materna. Lo siento Carmela pero cuando me pasaron las fotos al ordenador no estaban bien, ahora con la luz de la cocina las fotos hacen brillos, salen desenfocadas por que tiene que ser desde muy cerca y es cuando yo empiezo a enfadarme y a renegar como nadie.

Este salmón en camisa es una receta de Gaby que me llamó mucho la atención cuando la leí. Tenía dos ingredientes que me gustan mucho: el hojaldre y el salmón. Además por su elaboración me parecía un plato para un día especial.
Por fin llegó ese día. El martes fue mi aniversario de boda, ya catorce años, y desde hace mucho en días como éste a mi marido no le hago regalo, le preparo una cena muy especial.
Es cierto que la receta no es tal cual como la pone Gaby, ella la acompaña con arroz, que yo no puse por que era cena y además había hecho unos pinchos y una entrada y me parecía que si hacía el arroz iba a ser mucha comida.
El resultado muy bueno. Es un plato de sabor fino y delicado que comes despacio para que no se acabe. Vamos de restaurante caro. Así que animaros a probarlo no os arrepentiréis.
NECESITAMOS: (hice las seis raciones que indica Gaby en la receta).
- Una lámina de pasta de hojaldre de 500gr.
- 500 gr. de salmón.
- 200 gr. de champiñones en láminas.
- 400 gr. de espinacas frescas.
- 1 cebolla picada.
- Un par de cucharadas de tomate casero.
- Un calabacín para adornar.
- Pan rallado.
- Aceite.
- Sal y pimienta.
LO HACEMOS:
Se limpia el salmón de pieles y espinas, se parte a dados y se reserva.
Se quita el rabo a las espinacas y se pican finamente. Se reservan.
En una sartén grande se pone un poco de aceite y se pocha la cebolla, cuando esté casi hecha se agregan los champiñones y al poco las espinacas. Se salpimenta y se deja hacer a fuego suave hasta que se evapore el líquido que sueltan los champiñones y las espinacas. Dejamos que se enfríe o por lo menos que se temple para no estropear el hojaldre.
Mientras tanto calentamos el horno y extendemos el hojaldre. Lo dividimos en seis porciones iguales. Espolvoreamos cada porción con pan rallado y colocamos en el centro un par de cucharadas de las espinacas y champiñones, y sobre ellos los cubos de salmón. Cerramos muy bien, ya sabéis que el hojaldre suele cobrar vida en el horno.
Después de cerrados pinchamos muy bien con un tenedor cada hojaldre para que salga el vapor que se formará en cada uno de los saquitos y los pintamos con leche para que se hagan despacito.
Colocamos los saquitos en un papel de horno, bajamos la temperatura de éste a 180º y los metemos durante aproximadamente 30 minutos. En mi horno fueron los 30 minutos justos.
Mientras esperamos podemos hacer el tomate para acompañar el plato y pasar por la sartén con unas gotas de aceite los calabacines para que se doren.
Ponemos cada saquito en un plato y lo adornamos con el tomate y los calabacines.
Y...A DISFRUTAR.!!!

lunes, 4 de octubre de 2010

¡UN PREMIO! ¡QUÉ ILUSIÓN!



Este mediodía me he encontrado un mensaje de Juana en el que me decía que me daba un PREMIO. Bueno, ¡qué alegría! era lo que menos me esperaba. LLevo unos meses aquí y lo que menos pensaba era que mi blog le gustara tanto a alguien como para darme un premio.

Muchas gracias por acordarme de mi e indicarme como podía llevármelo a casa, que no sabía. Eso sí en cuanto venga mi marido le diré que me haga un archivo para guardarlo y que no se pierda.

Se me piden tres cosas; a saber: una: que responda a unas preguntas; dos: que formule una nueva pregunta y tres: que premie ocho blog y avise a los premiados.

Dicho y hecho. Perdonadme si algunos enlaces no salen. Creo que POR FIN he encontrado la fórmula mágica para que salga el enlace.

Las preguntas:
- ¿Te llevas buen con tu suegra?. Pues sí, discuto con ella y estoy cuando me necesita como si fuese mi madre.
- ¿Cual es tu reto?. Poder ser un poco mejor cada día.

- ¿Qué le dirías a tu jefe si te tocase la lotería?. No tengo jefe, pero creo que nada. Si fuese buen jefe tendría un detallazo con él.

- ¿Qué harías si alguien te miente?. Sinceramente no lo se, pero dependiendo de la persona podría sentirme muy mal.

- ¿Si se quema tu casa y sólo puede salvar una cosa ¿cuál sería?. Sin duda a mis hijos, aunque me aseguraría de que mi marido está junto a mí. Aunque parezca evidente.

Entras en un sitio con mucha gente ¿qué haces?
a) Pasar desapercibido.
b) Hacerte notar.
c) Integrarte en el grupo.
(esto es como los test del Super Pop)
Yo intentaré siempre pasar desapercibida. Me siento violenta cuando entro en un sitio con mucha gente, y más si no conozco a nadie.

- Ves el vaso ¿medio lleno o medio vacío?. Casi siempre medio lleno.

- Te encuentras una lámpara mágica. ¿Qué le pedirías?. Paz. No sólo la paz mundial, sino la paz interior. Esa que te hace ser cada día mejor y saber perdonar a las personas cuando se equivocan.

- ¿Qué te llevó a escribir este blog?. Las galletas que me regaló Paula, la hija de María José de Pasen y degusten, por ser una de sus catequistas. Estaban deliciosas.
- ¿Tienes un animal en casa?. Si dos tortugas de agua, Tortuguita y Tartaruga.

- ¿Piensas que vas por buen camino?. Creo que eso lo deben responder las personas que me conocen. Yo lo intento todos los días.


MI PREGUNTA.

¿Se os hace raro tener amistad con gente qué sólo conocéis a través de sus recetas?. A mi al principio si. Pero ahora ya me he olvidado de que cara tendremos y me imagino vuestras manos y cocinas en pleno ajetreo.


No se si será correcto nombrar a la persona que te premia pero quiero agradecerle a Juana su blog lleno de todo tipo de recetas, sobre todo las internacionales que tanto me gustan, explicadas con tanta sencillez que parece que se hacen en un pis-pas.


Los blogs elegidos son:

-A María José por que sus galletas fueron el comienzo de todo y por que además hace unos bizcochos riquísimos que iluminan las caras de mis hijos. Pasad a verlos.

- A Su, por que siempre se acuerda de que a los niños y a los adolescentes también les gusta cocinar y prepara recetas pensadas para ellos.

- A Merchi, por sus extraordinarias recetas y por su sentido del humor, me río mucho con sus conversaciones con Tito.

- A Tito 1972ml/el blog, por sus monopintxos y su sentido del humor, consigue que me ria mucho con él, sobre todo con sus conversaciones con Merchi.

- A Gaby por sus exóticas recetas y sus comentarios históricos a cerca de los platos que cocina. Siempre me gusta aprender algo de las cocinas de otros países.
- A Ana por tener un hijo capaz de compartir su afición por la cocina, y por ese libro que pronto saldrá a la venta. FELICIDADES.
- A Irene por esas recetas tan ricas con las que una queda tan guapamente.

El último y no por ello el menos importante es para todos aquellos que pasáis por mi cocina y hacéis que este trabajo merezca la pena. Muchas gracias a tod@s. Un beso enorme.










miércoles, 29 de septiembre de 2010

ESQUEIXADA


No se que le pasa a mi blog; últimamente anda revuelto, tarda mucho en publicar las entradas y y no la del de la semana pasada. Qué le vamos a hacer son cosas de "interné", ya sabéis...pura brujeríacuando lo hace no se corta, con una semana de retraso. Espero que en esta ocasión la fecha sea la de este miércoles .

A principios de verano Eva y Felipe me regalaron un bacalao salado estupendo. Con él preparé varios platos, algunos no llegaron a la foto. Esta esqueixada tuvo suerte y puedo compartirla con vosotros.

La esqueixada es un plato catalán que se prepara de diferentes formas, eso sí, imprescindible el bacalao. La mía sólo lleva tomate, cebolla, ajo y aceitunas pero se le pueden añadir pimiento rojo y verde. Lo cierto es que el bacalao está estupendo en cualquier guiso y si no animaros a preparar esta ensalada.
NECESITAMOS:

- 2oo gr. de bacalao desmigado.
- 2 tomates maduros.
- Media cebolla.
- Sal.
- Medio diente de ajo picado.
- Aceitunas negras.
- Aceite de oliva virgen.
- Vinagre al gusto.
- Pimienta negra molida.

LO HACEMOS:

Desalamos el bacalao según tengamos costumbre. Yo lo pongo en una ensaladera con agua y lo meto al frigorífico, cambiando el agua las veces necesarias hasta que esté en su punto. Yo siempre lo dejo muy soso, llevo mucho tiempo comiendo sin sal y ahora sosito, sosito lo encuentro en su punto.
Una vez desalado el bacalao lo escurrimos bien, limpiamos de espinas y pieles y lo partimos con la mano, lo desgarramos, y lo colocamos en el plato donde vayamos a hacer la esqueixada.
Picamos el diente de ajo muy pequeño, la cebolla en aros finos y después los partimos por la mitad. Pelamos los tomates y los partimos en trozos. Salamos un poquito si lo consideramos necesario y colocamos todo sobre el bacalao.
Adornamos con unas aceitunas negras.
Aliñamos a nuestro gusto con el aceite, el vinagre y la pimienta negra.
¿Os ha gustado?. Y ... a qué esperáis para correr a la cocina a prepararlo....

miércoles, 22 de septiembre de 2010

¿QUÉ ES LO QUE LLEVA ESTO TAN RICO?




Estos pinchos que parecen la casa de David el gnomo fueron la estrella de la comida de la que os hablé en la entrada anterior. Hice unos treinta y no sobró ninguno. Lo único que sabían decir entre bocado y bocado era ¿qué es lo que lleva esto tan rico?.

El mérito de estos pinchos no es mío, sino de Irene de sabor impresión que con sus aperitivosdemantequilladeanchoa,ajoyperejil me hizo quedar como una reinona.
Su elaboración no tiene complicaciones sólo necesitamos una batidora, un buen rodillo y un poco de tiempo para hacerlos, por lo demás son rápidos, se pueden preparar con antelación y además tienen un sabor riquísimo. Las anchoas y el tomate juntos siempre son una excelente combinación.
NECESITAMOS:
- Una lata de anchoas de 30 gr.
- 100 gr. de mantequilla o margarina a temperatura ambiente.
- Un diente de ajo.
- 15 gr. de perejil.
- 8 rebanadas de pan de molde sin corteza.
- Tomates cherry.
- Film trasparente para envolver los pinchos.
LO HACEMOS:
En el vaso de la batidora ponemos la mantequilla, las anchoas escurridas, el diente de ajo y el perejil. Batimos hasta que se forme una pasta y reservamos.
Con el rodillo estiramos las rebanadas de pan de molde y untamos en ellas la pasta de la mantequilla de anchoas.
Una vez que tenemos las rebanadas untadas con la mantequilla de anchoas las enrollamos, las envolvemos en el film transparente y las metemos en la nevera.
Cuando estén bien frías las partimos en tres o cuatro trozos, según el tamaño de la rebanada de pan, y adornamos con medio tomate cherry.
A partir de ese momento la diversión está servida...

martes, 14 de septiembre de 2010

VARIACIONES DE UNA SANTANDERINA




Desde hace unos veranos por las fiestas de Santiago, que aquí se celebran a lo grande, el ayuntamiento ha tenido la genial idea de poner casetas a los bares en determinadas zonas de la ciudad, junto a la playa del Sardinero, en la Alameda, Plaza de Pombo... Pues este año hemos ido.
A mi marido le hablaron de un pincho muy bueno, un foie o una mousse de jamón ibérico y quería que lo probara a ver si lo podía hacer.

Dicho y hecho; nos fuimos con los chiquis a las casetas y probamos el famoso pincho que a mi pobre entender era un alioli con trozos de jamón encima. La visita tuvo su fruto ya que en una de las casetas descubrí una exquisitez, la santanderina, que era ni más ni menos que un pochado de pimiento rojo, verde y amarillo con cebolla y encima un trozo de sardina ahumada con un hilo de aceite. La bomba. Fue toda una revelación que aquello tan sencillo pudiese estar tan bueno.

Al mes vinieron unos amigos a comer y pensé en el pincho. No encontré la sardina ahumada, seguramente en el Corteinglés la haya, pero no me dio tiempo a ir. Solucioné el problema con otra cántabra, la anchoa. Compré anchoas ahumadas y las puse coronando el pincho en lugar de la sardina, le da un sabor más recio aunque no varía la calidad del pincho, desaparecieron de la mesa enseguida.

NECESITAMOS:

- Medio pimiento verde.

- Medio pimiento rojo.

- Medio pimiento amarillo.
- Media cebolla si es grande, sino tres cuartos.

- Anchoas ahumadas.

- Pan de barra.

- Aceite.

- Sal.

LO HACEMOS:

Picamos finamente la cebolla y los pimientos.

En una sartén con el aceite frío ponemos la cebolla. Si la ponemos con el aceite en frío se quedará dulce. Cuando el aceite comience a calentarse añadimos los pimientos, salamos y dejamos pochar a fuego lento.

Una vez estén listos los pimientos y la cebolla los dejamos enfriar un poco mientras cortamos el pan en rebanadas de un centímetro aproximadamente, y la anchoa de un tamaño parecido al del pan.

Para montar el pincho: ponemos en cada rebanada de pan una cuchara de los pimientos pochados y sobre éstos un trozo de anchoa y la regamos con un hilo de aceite de oliva, si es virgen mejor.

Fácil, rápido y delicioso. ¿Se puede pedir más?.

lunes, 13 de septiembre de 2010

CREMA FRÍA DE CALABACÍN



Ahora que nos toca la campaña, "tengo que entrar en la ropa de invierno" este plato viene que ni al pelo. Se trata de otra receta del libro "Miénteme mientras me pesas", del que ya publiqué otra entrada. Es una receta como la anterior, sin problemas, fácil y rápida de hacer. Lo único que hay que tener es tiempo para dejarla enfriar. En casa la comimos templada tirando a fría por que ya no podíamos esperar más, había que ir a algún sitio y a mí se me hizo tarde para preparar la comida.
Las almendras que lleva de adorno, le dan un sabor ....; las compré crudas, no las quería con sal, y las pasé por una sartén con un poco de aceite hasta que estuvieron doradas. Después las machaqué en el mortero.
NECESITAMOS:
- 1 kg de calabacines.
- 1 pimiento verde.
- 1 puerro.
- 1 cebolla.
- 4 cucharadas soperas de aceite.
- 1 litro de caldo vegetal.
- 100 gr. de almendras (yo puse como la mitad).
- perejil picado.
LO HACEMOS:
Rehogamos en una sartén o cazuela de fondo grueso la cebolla, el puerro y el pimiento, por ese orden. Cuando esté todo pochado se añade el calabacín con la piel cortado en rodajas.
Una vez que el calabacín comience a echar el jugo añadimos el litro de caldo y dejamos que cueza.
Cuando esté cocido lo pasamos por la batidora y luego por el chino.
En una sartén con un poco de aceite tostamos las almendras y las ponemos en un papel de cocina. Una vez frías las machacamos en el mortero.
Adornamos la crema una vez fría con las almendras y el perejil.
Bueníiiisimo.

martes, 7 de septiembre de 2010

ENSALADA DE QUESO



Lo primero darle las gracias a Tere y a Modesto por los tomates, calabacines y pimientos que me han regalado. Daré buena cuenta de ellos y si es posible y las fotos salen como deben aparecerán en estas páginas en breve.

Hoy estoy un poco baja apenas he dormido y la culpa es de los nervios, hoy asignaban las vacantes para institutos y tenía alguna pequeña posibilidad y he mirado tantas veces la hora que a las seis ya estaba con los ojos como platos. Por cierto, no me dieron nada, era de esperar, es la primera vez.
Así que he decidido despertar con esta riquísima ensalada que creo que os gustará a mas de uno, es fácil de hacer y la vinagreta de mermelada de fresa le aporta una sabor supremo. Parece que os quiero vender algo...

Este plato sólo tiene un secreto: hay que tener el queso en la nevera hasta que los vayamos a empanar, por lo demás se prepara en un visto y no visto.


NECESITAMOS:


- Una cuña de queso brie o cammenbert, el que más os guste.

- Un sobre de lechugas variadas.

- Un huevo.

- Pan rallado.

- Una cucharada de mermelada de fresa.

- 2 cucharadas de vinagre.

- 4 cucharadas de aceite de oliva.

- Aceite.

- Sal y pimienta.


LO HACEMOS:


En una sartén calentamos el aceite para freír el queso. Preparamos el pan rallado y batimos el huevo.


Una vez que tengamos todo listo sacamos el queso de la nevera y lo partimos en trozos. Cada pedazo de queso lo pasamos por pan huevo y pan otra vez y lo freímos con el aceite bien caliente para que esté el menor tiempo posible en la sartén, no se rompa y no se deshaga en la sartén. Sacamos el queso y lo ponemos sobre papel de cocina. Reservamos.


En el plato donde vayamos a presentar la ensalada ponemos la lechuga y encima de ésta el queso.


Para hacer la vinagreta: mezclamos todos los ingredientes y los batimos bien con un tenedor.

Bañamos generosamente el queso y la lechuga con la vinagreta y listo para llevar a la mesa....

si soy capaces de esperar.


Es un plato muy lucido para cuando viene alguien a cenar; además a la gente le encanta el contraste del queso caliente con el dulzor de la vinagreta.

jueves, 2 de septiembre de 2010

POLLO CON BERENJENAS

Hay platos que dan mucha guerra a la hora de fotografiarlos y éste fue uno de ellos.

Por lo general yo cocino los sábados, tengo más tiempo y además esa noche mi marido cuelga el régimen por unas horas.

El principal problema es la luz, a esas horas de la tarde-noche en que ya está la cena preparada y los niños cenando, ya casi en la cama, es muy difícil hacer fotos. La luz artificial es escasa y muchas veces da peores resultados que si apagases la luz y encendieras una cerilla.

En fin, aquí lo probé todo. La "vitro" de fondo, la mesa de la cocina, la de la sala, y al final conseguí lo que veis en el mueble de la entrada. No es la maravilla de las maravillas pero algo es algo. De todas maneras os puedo asegurar que el plato está más rico que en la foto y no es difícil de preparar.

La receta está sacada del libro de cocina china de la colección del mundo, para ser más exactos del número 20.
Vamos allá.
NECESITAMOS:
- Cuatro pechugas de pollo.
- Una berenjena.
- Dos dientes de ajo.
- 80 cl. de caldo de ave.
- 2 cucharadas de vino de arroz (si no tengo pongo vino blanco).
- 1 cucharada de salsa de soja clara.
- 3 cucharadas de fécula de patata (suelo poner maizena).
- 1 huevo.
- Sal.
- Aceite vegetal (de girasol que soporta muy bien las temperaturas del wok).
LO HACEMOS:
Cortamos las pechugas en trozos no muy grandes y las ponemos a macerar en la nevera con el huevo batido y dos cucharadas de fécula de patata durante doce horas (dejadlas una noche).
Se fríen los trozos de pollo, en el wok o en una sartén, con mucho aceite bien caliente hasta que empiece a cambiar el color y se reservan sobre papel de cocina.
Pelamos la berenjena y la cortamos en trozos del tamaño del pollo. Al igual que éste la freímos en aceite abundante y la reservamos sobre papel de cocina.
En el wok o en una cazuela sofreímos los ajos picados y cuando comiencen a dorarse añadimos el pollo y las berenjenas, salpimentamos y regamos con el vino de arroz.
Seguidamente se agrega el caldo de ave y dejamos hervir unos dos minutos antes de incorporar el resto de la fécula de patata y, por último, la salsa de soja.
Se saltea todo unos minutos y se sirve.
Podéis acompañarlo con un arroz blanco con huevo, como el de los chinos.
Un plato exótico y bajo en calorías ...¿podéis pedir más?.
Besos a tod@s.

miércoles, 25 de agosto de 2010

CARPACCIO A MI MANERA

El carpaccio toma su nombre de Vittore Carpaccio, pintor veneciano del renacimiento, que vivió entre 1.460 y 1525. De su creación artística cabe destacar el uso del contraste entre el blanco y el rojo, colores predominantes en dicho plato.
La creación del carpaccio se la debemos a Arrigo o Giussepe Cipriani (he encontrado los dos nombres), quien en 1.950, en su restauranteHarry´s Bar de Venecia, creó esta receta para su restaurante inspirado por una de sus clientes habituales a la cual el médico le había prohibido comer la carne cocinada. El nombre del carpaccio le fue dado por que aquel año se celebraba en Venecia una gran exposición del pintor.
Inspirado en el carpaccio original comimos en un restaurante italiano, hace muchos años, un carpaccio de salmón, de sabor suave y delicado. En él el salmón crudo se marinaba con aceite, limón y unas especias.
Hoy yo lo preparo con salmón ahumado, no lo puedo comer crudo soy alérgica, pero el resto de los ingredientes son los que comimos en aquel restaurante.
NECESITAMOS:
- 150 gr. de salmón ahumado.
- Tomates cherrys.
- Un aguacate.
- 150 gr. de queso semicurado.
- Aceite de oliva, si es posible virgen.
- Sal.

LO HACEMOS:

En la bandeja donde vayamos a presentar el plato ponemos un chorrito de aceite y lo extendemos por la bandeja. Sobre el aceite se coloca el salmón partido en trozos de unos dos centímetros, y sobre él el queso partido en láminas finas, cuanto más finas mejor.

Alrededor del salmón y el queso alternamos los tomates partidos por la mitad y con una pizca de sal y el aguacate partido en láminas. Regamos ambos con un poco de aceite de oliva virgen y adornamos con albahaca.

Es un plato sencillo y de sabor suave y delicado, un poco de salmón, el queso, el tomate y el aguacate todo fundido en la boca...¿os animáis a probarlo?.

jueves, 19 de agosto de 2010

TARTA DE QUESO

Esta es la tarta que más éxito tiene en casa, les gusta a todos, a los de casa y a los de fuera. Como ayer fue mi cumpleaños y creo que no me cabríais todos en casa os dejo la receta para que os animéis ha prepararla y celebréis conmigo un día tan especial.
Es una receta fácil y que seguro que muchos de vosotros conocéis.

NECESITAMOS:

- 25 galletas María.

- 150 gr. aproximadamente de mantequilla o margarina.

- Una tarrina de queso blanco tipo Philadelphia.

- Un brick de nata líquida de 200 ml.

- Un sobre de gelatina de limón.

- Medio vaso de agua.

- Mermelada al gusto, yo prefiero la de arándanos.

- Un molde desmoldable.


LO HACEMOS:

Preparamos el molde forrándolo con papel de aluminio.

Machacamos las galletas y las pasamos por la picadora hasta convertirlas en polvo, como si fueran harina.

Derretimos la mantequilla y la mezclamos con la galleta hasta que queda humedecida, si necesitamos más mantequilla la vamos añadiendo hasta que la mezcla tome cuerpo para poder trabajar con ella.

Forramos el molde con la galleta con mucho cuidado. Yo cojo la masa en bolas del tamaño de una nuez y la estiro primero con los dedos y luego la coloco en el molde y la acabo de alisar sobre éste.

Una vez forrado el molde preparamos el relleno. En el vaso de la batidora ponemos el queso blanco, la nata y la gelatina de limón que habremos preparado con el medio vaso de agua. Lo batimos bien.

Una vez batido lo vertemos en el molde y lo metemos en la nevera, donde tiene que reposar al menos una noche.

Al día siguiente sacamos la tarta, la desmoldamos, cortamos los trozos de galleta que sobren arriba y la cubrimos de nuestra mermelada favorita o con fruta fresca.

La volvemos a meter en la nevera hasta que vayamos a comerla.

sábado, 7 de agosto de 2010

NOS VAMOS DE VACACIONES


Por fin llegó agosto y con él LAS VACACIONES.

Me voy, nos vamos... bueno que ya están hechas las maletas. Qué ajetreo.

Antes de despedirme por unos días os dejo este pincho de uno de los bares a los que solemos ir en Salamanca. Es para daros un poco de envidia sana.


NECESITAMOS:


-Un par de patatas medianas.

- Dos huevos.

- Dos puñados generosos de gulas.

- Una guindilla.

- Aceite.

- Sal.


LO HACEMOS:


Pelamos las patatas y las picamos en círculos muy finos con una mandolina o rallador. Las salamos y las freímos. Reservamos.

En una sartén ponemos un par de cucharadas de aceite la guindilla y la rehogamos. Cuando esté añadimos las gulas y les damos un revolcón. Reservamos.

Por último freímos los huevos.

En una bandeja o un plato grande ponemos las patatas, sobre ellas los huevos y las gulas. Con un cuchillo y un tenedor lo picamos todo de forma grosera y lo servimos en platos o cazuelitas individuales.


Un beso grande a todos y hasta la vuelta.

martes, 3 de agosto de 2010

CREMA DE ZANAHORIAS A LA NARANJA



Para Esther y sus dos meses de régimen.


Hace unos meses un compañero de mi marido le hizo un regalo aprovechando que está a régimen, se trata de un libro de la editorial Everest que tiene un título tan a propósito como Miénteme mientras me pesas, escrito por Marta Aranzadi e ilustrado por Maite Niebla, hermana del compañero de mi marido.


El libro es muy recomendable para todos aquellos que hagáis régimen o penséis hacerlo ya que a través de tres pacientes de diferente edades, una adolescente de quince años, una mujer de cuarenta y... y un hombre ya metido en los cincuenta, la autora cuenta sus experiencias con ellos y como con fuerza de voluntad y un régimen adecuado se puede adelgazar incluso saliendo a cenar o como es el caso del varón siendo un hombre que pocas veces come en casa.


En el libro no sólo se muestra la satisfacción de las personas que adelgazan si no también la de la autora que ve como los esfuerzos que hacen los pacientes y los de ella misma, modificando dietas y dando ánimos y buenos consejos, dan resultado.


La receta de hoy está sacada de este libro y la verdad que está muy rica, para mí fue una sorpresa, y se puede comer fría o caliente.



NECESITAMOS:

- Una cebolla.

- Un puerro.

- 8 zanahorias.

- 1 litro de caldo vegetal.

- 1 naranja.

- Una pizca de cúrcuma.

- Una pizca de pimienta negra molida.

- Cilantro fresco para adornar.

LO HACEMOS:

Pelar las zanahorias y partirlas en círculos no muy gruesos. Pelar y picar la cebolla y el puerro.

En una cazuela pochar la cebolla, el puerro y las zanahorias. Añadir las especias y cuando las hortalizas cambien de color agregar el litro de caldo. Dejar cocer.

Cuando las verduras estén blandas exprimir la naranja e incorporar el zumo al guiso así como la cáscara de la naranja. Dejar cocer otro rato (unos quince minutos).

Sacar la cáscara de la naranja y pasar por la batidora las hortalizas.

Para darle más sabor se puede añadir la cáscara de la naranja rallada.

Yo no sabía si les iba a gustar a los niños así que cuando serví la crema pregunté quien quería naranja rallada. Es cierto que le da un toque muy especial y sabroso.

Adornar con cilantro fresco, yo no tenía y lo puse seco.

Con recetas tan fáciles y originales cuesta menos hacer régimen ¿no?.





martes, 27 de julio de 2010

MARMITA


Me gusta el verano por muchas razones: hace calor y se puede ir a la playa, es mi cumpleaños y sobretodo por que por fin se puede comer marmita. La ventaja de vivir a orillas del Cantábrico es que aunque sea verano nunca hace demasiado calor y llueve más días que los que luce el sol, así que comer platos calientes como éste no es un esfuerzo. Eso sí, como el día que toca marmita sea caluroso sudaremos el goterón.

En mi casa la receta de la marmita ha sido mejorada con el paso de los años. Mis padres son aficionados a pescar y tenían un barco con el que se podían salir a pescar bonitos. Gracias a esta afición conocieron patrones de barcos pesqueros que enseñaron a mi madre como hacían ellos la marmita a bordo y esa receta junto con la de mi madre crearon una marmita a caballo entre la marmita o sorropotum ( así la llaman en San Vicente de la Barquera) y el marmitako, si se me permite "lujuriosa" por lo buenísima que está, con un caldo espeso y un sabor recio que evoca la Sotileza de Pereda.

Lo más importante a la hora de hacer la marmita son la cazuela, mejor si es de barro, las patatas que en vez de picarlas se deben triscar (meter el cuchillo y tirar) y un buen bonito. A mí me gustan los trozos sobretodo si son de la zona de arriba, del cogote, tienen muchas espinas y cuesta limpiarlos pero son más jugosos. Si os decidís a comprar la típica rueda hay que mirar que esté bien sangrada, me explico. El centro de la rueda suele tener un color oscuro, esa es la sangre del bonito, cuanto más pequeño sea ese centro mejor sangrado estará y tendrá mejor gusto y no desaprovecharemos nada, ya que lo corriente suele ser quitar esa parte oscura.

Por último, la marmita era la comida que se hacía en los barcos de pesca, ya que se comía de lo que se pescaba. Comían todos de la misma olla y cada uno con su cuchara y un trozo de pan. Metían la cuchara cogían su ración y daban un paso atrás, hacían "el cucharada y paso atrás", con lo cual se evitaban las peleas de si tu has comido más que yo. Ya veis un reparto justo.

Vamos con la marmita de mi madre...


NECESITAMOS:

- 750 gr. de bonito limpio de pieles y espinas.
- 1 kg. de patatas.
- Un pimiento rojo y otro verde.
- Un tomate maduro.
- Una cebolla.
- Un diente de ajo.
- Una ñora o pimiento choricero.
- Una cucharita de pimentón dulce.
- Un vasito de vino blanco.
- Pimienta blanca.
- Aceite.
- Agua.
- Sal.
LO HACEMOS:
Ponemos la ñora en agua la noche antes de hacer la marmita.
Picamos la cebolla, el ajo y los pimientos finamente, reservamos.
Pelamos las patatas y las triscamos al partirlas, reservamos.
Partimos el bonito una vez limpio en trozos del tamaño de las patatas, reservamos.
Sacamos la ñora del agua, la dejamos escurrir y raspamos su carne.
En la cazuela de barro ponemos un chorro generoso de aceite y cuando esté templado agregamos la cebolla, el ajo y los pimientos y los pochamos poco a poco.
Una vez que la cebolla y los pimientos estén hechos añadimos las patatas, la carne de la ñora y la cucharita de pimentón y lo movemos bien para que las patatas cojan el gusto de la ñora y el pimentón. Vertemos el vasito de vino y volvemos a remover. Dejamos que el vino pierda el alcohol y cubrimos las patatas con agua.
Mientras las patatas se van cociendo pelamos el tomate.
Cuando las patatas estén a media cocción añadimos el bonito, lo movemos para que se incorpore al guiso y condimentamos con la pimienta blanca. Movemos la cazuela como si estuviéramos haciendo un pil-pil para que el caldo tome cuerpo y cuando las patatas estén casi cocidas añadimos el tomate. El tomate se pone al final del guiso para que la patata no se endurezca.
Cuando la patata y el bonito estén cocidos salaremos y dejaremos que de un hervor.
Tenéis que mover la cazuela según os guste de grueso el caldo de los guisos, si es caldoso hacedlo poco.
Ya estamos todos preparados con la cuchara y el pan....¿está buena?.