viernes, 26 de abril de 2024

CHAMPIÑONES CON MIEL



Cuando vi esta receta en la página de Cocina Fácil lo que más me llamó la atención fue que se trataba de una receta de más de 2000 años, eso quería decir que se comía en la antigua Roma. En aquel momento supe que no podía dejar de hacerles. 
Lo cierto es que resulta sorprendente lo bien que combinan los champiñones con la miel.

NECESITAMOS

- Una bandeja de champiñones.
- 3 cucharadas de miel.
- Un ajo.
- Una guindilla .
- 3 cucharadas de aceite.
- Perejil.
- Sal.

LO HACEMOS

Limpiamos los champiñones y les quitamos el tallo. Los secamos. Si son pequeños podemos dejarlos tal cual, si son grandes podemos partirlos por la mitad o en cuatro partes.
Reservamos.

Ponemos el aceite en una sartén y salteamos a fuego suave el ajo pelado y cortado en láminas. Cuando comience a tomar color añadimos la guindilla y los champiñones. Salamos al gusto y los cocinamos durante un par de minutos. 

Pasado este tiempo añadimos la miel a los champiñones y dejamos que se acaben de ablandar removiéndoles para que se caramelicen ligeramente.

Servimos los champiñones espolvoreados con el perejil picado.

miércoles, 20 de marzo de 2024

PAPAS RELLENAS



Cuando Ana, la novia de mi hijo, tiene un momento libre aprovecho para meterme con ella en la cocina y aprender algún plato nuevo de su tierra, Perú. En esta ocasión hicimos estas riquísimas papas rellenas y digo riquísimas por que no quedó ninguna. 

 NECESITAMOS

- 1kg de patatas blancas, más o menos del mismo tamaño.
- Harina.
- Un huevo.

Para el relleno de las papas:
- 1/2kg de carne de ternera desmenuzada (estofada o cocida).
- 2 huevos.
- 1 cebolla roja.
- Perejil fresco.
- 2 dientes de ajo. 
- Pimienta. 
- Comino.
- 2 tomates pera.
- Ají panca en pasta.
-100gr de pasas.
- Un par de cacitos de caldo de pollo o agua.
- Aceite.
- Sal.

Para la salsa tártara:
- 2 huevo.
-Aceite de girasol.
- Pimienta.
-Sal
-Mostaza
-1 lima.

Para la ensalada:
- 2 cebollas rojas.
- Perejil.
- 2 pimientos ají.
- 1 lima

Hervimos la patatas una media hora, ya que nos interesa que queden muy cocidas para poder hacer con ellas una pasta. Cocemos tres huevos junto con las patatas durante ocho minutos.

Mientras tanto preparamos el relleno. Para ello picamos una cebolla en brunoise y cuatro o cinco ramitas de perejil con un poco tallo muy finamente.
En una sartén ponemos aceite, dejamos calentar un poco y añadimos la cebolla, los ajos prensados, la pimienta negra y un poco de comino. Dejamos hacer hasta que la cebolla empiece a caramelizarse. Añadimos el  tomate picado en cuadraditos (también podemos poner dos o tres cucharadas de pasta de tomate) , sal, un par de cucharadas de ají y cocinamos unos tres minutos. Incorporamos la carne y la  mezclamos bien  con la cebolla y el tomate. Añadimos las pasas, dejamos hacer un poco e incorporamos el caldo de pollo poco a poco, sólo para hidratar la mezcla. Cocinar entre 10 y 15 minutos. Corregir de sal, añadir el perejil picado y  dos de los huevos cocidos partidos en trocitos. Dejar enfriar.

Pelar las patatas cocidas cuando aún estén calientes, prensarlas o pasarlas por el pasapuré para obtener un puré que nos permita  manipularlo sin deshacerse. Extenderlo sobre un papel de film y dejar enfriar.

Para la salsa tártara hacemos una  mahonesa y le añadimos media cucharada de mostaza, pimienta y el zumo de medio limón. Volvemos a batir otra vez. Rallamos uno de los huevos cocidos y picamos muy fino unas hojas de perejil, añadimos todo a la mahonesa. Podemos poner un poco más de limón si lo consideramos necesario.

Para la ensalada picamos la otra cebolla en pluma y la dejamos reposar 5 minutos en un recipiente con agua. Después la enjuagamos tres veces. Cortamos el perejil y el ají muy fino, mezclamos con la cebolla y aliñamos con el zumo de la lima al gusto.

Ponemos a la patata que ya se habrá enfriado sal y pimienta y mezclamos. Formamos bolas del tamaño de la palma de la mano,  las aplastamos con la mano de forma que podamos poner sobre ellas un par de cucharadas o tres del relleno y las cerramos con mucho cuidado de que queden selladas.
Freímos las papas. Batimos un huevo y ponemos en harina en un plato. Pasamos una papa rellena por huevo, luego por harina y otra vez huevo y harina y freímos en aceite caliente con mucho cuidado de que no se nos rompan. Sacamos cuando estén doradas.
Emplatamos con la salsa tártara y la ensalada de cebolla que hemos hecho,

viernes, 2 de febrero de 2024

LENGUA DE CERDO ESTOFADA

 


La lengua de cerdo no es una carne que se coma en Cantabria, pero mi suegra que era de Salamanca la cocinaba siempre que la encontraba en el mercado o en alguna carnicería. La forma en que la guisaba era muy sencilla y lo mejor es que no hay pasarse la mañana metido en la cocina. Eso sí, dentro de su sencillez es deliciosa, el olor que desprende cuando se guisa es de ¡¡¡¡qué ricooooo!!!!


NECESITAMOS (para cuatro personas)

- Tres lenguas de cerdo.

- Dos cebollas.

- Vino blanco.

- Aceite de oliva.

- Agua.

- Sal y pimienta.


LO HACEMOS

Picamos la cebolla en juliana. En una cazuela ponemos aceite suficiente para que cubra el fondo, calentamos, añadimos la cebolla y la dejamos pochar a fuego suave.

Mientras se va haciendo la cebolla salpimentamos las lenguas y las reservamos.

Cuando la cebolla esté en su punto añadimos las lenguas y las hacemos un poquito en el aceite y el jugo que haya soltado la cebolla, añadimos un chorrito de vino blanco y tapamos para que se consuma el alcohol.

Una vez que el vino ha intensificado su aroma y sabor de las lenguas, añadimos el agua suficiente para cubrir dos tercios del conjunto. Salamos y dejamos cocer a fuego suave al menos una hora. 

Cuando podamos pinchar las lenguas con un tenedor estarán cocidas y podremos partirlas a lo ancho en rodajas no muy gruesas. Después las volvemos a añadir a la salsa y las damos un hervor para que se impregnen del aroma y sabor de la salsa.

Es importante controlar que el guiso no se quede seco y añadir agua y corregir de sal si es necesario.

Es fundamental un buen pan para mojar la salsa y... a disfrutar


viernes, 5 de enero de 2024

TALLER DE COCINA DEL NEOLÍTICO





 

El pasado mes de noviembre la Asociación de Amigos del Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria (AAMUPAC) llevó a cabo su tradicional taller de cocina, este año dedicado a la alimentación  en el Neolítico.

Los cereales han sido el fundamento de nuestra alimentación desde la Prehistoria reciente, de ellos obteníamos y obtenemos la energía diaria y no sólo ha sido la base de diversos tipos de panes sino que su versatilidad les hace ser principio de numerosas preparaciones no solo sólidas, sino también diversas bebidas alcohólicas como la cerveza, que generalmente se hace con cebada.

Entre los diversos cereales encontramos la espelta, a la que se considera el cereal más antiguo y presenta un gran contenido en minerales y tiene menos gluten que el trigo, el cereal más consumido en el mundo y que se remonta a unos 12.000 años. Otros tipos de cereal son el arroz, el khorosan propio de Oriente Próximo, el maíz en América, el centeno, la cebada, la avena o el mijo.


Lo primero que elaboramos esa mañana fue el pan. El Matzo y el Missi Roti son los dos tipos de pan que hicimos. El primero también conocido como pan ázimo, se preparaba en la Pascua judía y lo realizamos con harina de cebada; el segundo con harina de garbanzo y sí, se lo que estáis pensando que el garbanzo no es un cereal pero no podemos olvidar que esta harina también conocida como harina chana es muy importante en la cocina de la India, Bangladés, Birmania...

                                               Matzo


                                            Missi Roti


Después fue una Baba Ganoush hecha con tahina y berenjenas. La tahina se elabora con sésamo, una semilla de origen indio y africano de color entre blanco cremoso y negro. La tahina es una salsa tradicional de la cocina de Oriente Medio.

                                                        Baba Ganoush


Los cereales sirven para elaborar platos de carne o pescado como fue el caso de estos buñuelos de mejillones cuya masa llevaba harina de trigo y cerveza que acompañamos con una salsa de nueces, vinagre, pan de molde mojado en agua y escurrido, ajo machado, sal y aceite que removimos hasta obtener una textura del tipo de la mahonesa.

                                            Midye tava


Continuamos nuestro viaje culinario hacia Oriente Próximo con un delicioso Tabboulé cuya base es el trigo bulgur, un trigo cocido, puesto a secar y machacado. También es posible encontrarlo de otros cereales como el arroz, la espelta o la cebada. 

                                            Tabboulé


Nuestro recorrido por los platos con cereales lo finalizamos con un guiso de maíz cubano. El maíz es un cereal de la familia de las gramíneas, rico en almidón y no contiene gluten. Fue el cereal fundamental para las civilizaciones maya y azteca, siendo consumido en México ya hace 7.000 años. Colón lo introdujo en España siendo conocido entonces con el nombre de panizo.

                                           Guiso de maíz cubano

Finalizamos nuestro ágape con un arroz con leche, un postre de siempre que gustan tanto a los mayores como a los jóvenes.
Espero que os haya gustado nuestro recorrido por el cereal. 
Hasta la próxima.