viernes, 6 de diciembre de 2024

ROUGAILLE DEL OCÉANO ÍNDICO


La receta de hoy es un plato de las Islas Mauricio que puede prepararse tanto con langostinos como con gambas, eso sí, que sean un poquito grandes por que si no se harán demasiado pronto y el plato perderá sabor y sería una pena por que la salsa rougaille  es deliciosa.
La receta está sacada del libro Culinaria Mundial con recetas de 40 países de la editorial h.f.ullmann.


NECESITAMOS para 4 personas
- 12 langostinos o gambas grandes.
- 1/2 kilo de tomates.
- 1 cebolla.
- 1 guindilla verde.
- 4 ramas de tomillo y otras 4 de perejil.
- 1 ramita de cilantro.
- 4 dientes de ajo.
- 1 trozo de jengibre fresco.
- 1 cucharada de tomate concentrado (yo usé tomate frito)
- Aceite, sal y pimienta.


LO HACEMOS
Con mucho cuidado y un cuchillo que esté bien afilado hacemos un corte en el lomo de los langostinos y les sacamos el hilo intestinal.
En una sartén grande o en una cazuela donde luego nos quepan todos los langostinos ponemos aceite y los rehogamos hasta que se doren por ambos lados. 
Retiramos y reservamos.
En la misma sartén ponemos el ajo, el jengibre y la cebolla finamente picados. Añadimos el tomillo desmenuzado y el perejil picado y rehogamos durante cinco minutos. Incorporamos el tomate pelado y cortado en trozos grandes, la guindilla y el concentrado de tomate y dejamos que se haga durante unos diez minutos a fuego medio cuidando que no se queme. Salpimentamos el conjunto.
En la salsa que hemos elaborado disponemos los langostinos y dejamos que cuezan cinco minutos moviendo la sartén con cuidado para que éstos no se rompan y se mezclen los sabores.
Una vez cocidos los langostinos y la salsa bien ligada añadimos el cilantro picado.
Nuestro plato ya está preparado para degustarlo calentito, que no pierda aroma.



lunes, 28 de octubre de 2024

PASTEL DE PUERRO Y QUESO AZUL


Esta apetitosa receta la encontré en el blog de María José, Pasen y degusten.
Si sois aficionados al queso azul se convertirá en vuestro plato favorito y acompañado con unos panecillos tostados con pasas es una delicia.

NECESITAMOS

- 170gr. de la parte blanca del puerro.

- 100gr. de cebolla.

- Aceite.

- 50gr. de queso azul, del que más os guste.

- 2 huevos.

- 65gr. de nata para cocinar..

- Sal y pimienta blanca.


LO HACEMOS

Buscamos un recipiente que pueda ir al horno y que nos quepa el molde en el que vamos a hacer el paté.

Preparamos el baño María poniendo agua en el recipiente. La cantidad de agua debe ser más o menos la mitad de la altura del molde del paté. Metemos el recipiente con el agua en el horno a 180 grados para que ésta vaya calentando.

Mientras, vamos preparando el paté. Picamos finamente el puerro y la cebolla y lo pochamos en una sartén con aceite hasta que cambien de color.

En un cuenco batimos los huevos, la nata y el queso azul. Salpimentamos el conjunto.

Mezclamos el puerro y la cebolla ya pochados con el preparado de huevo, nata y queso.

Engrasamos con un poco de mantequilla el molde en el que vamos a hacer el paté y vertemos la mezcla en él.

Con mucho cuidado ponemos nuestro molde en el recipiente que tenemos en el horno y horneamos unos 30 minutos.

Pasado este tiempo pinchamos el paté con una brocheta y si sale limpia sacamos el paté del horno y  lo dejamos enfriar, si no lo dejamos hasta que la brocheta salga limpia.

Sacamos del horno y dejamos enfriar para poder desmoldarlo.

Una vez frío lo desmoldamos y servimos en una bandeja. Podemos acompañar nuestro paté con panecillos tostados y mahonesa al gusto de cada comensal.

Ya veréis que riquísimo está.

domingo, 29 de septiembre de 2024

TABULÉ MARROQUÍ

 


La receta de este tabulé se encuentra en el Gran Libro de la Cocina del Desierto de la editorial Tikal. En su introducción al hablar de los orígenes del cuscús señala que este plato se introduce en Europa meridional en el momento en que los árabes se encuentran en España.

NECESITAMOS (para tres raciones)

- 150 gr. de cuscús de grano medio.

- 20cl. de agua.

- Media cucharadita de sal.

- Una pizca de azafrán.

- 1 tomate.

- 1 cebolla y media pequeña.

- Perejil fresco. La cantidad que nos guste.

- Menta fresca. La cantidad que nos guste.

- El zumo de un limón.

- Aceite.

-Sal y pimienta.


LO HACEMOS

Lo primero que hay que hacer es preparar el cuscús. 

Ponemos el cuscús en una ensaladera. En una cazuela hervimos el agua con media cucharita de sal y el azafrán. Una vez que haya hervido vertemos el agua en el cuscús y los dejamos reposar cinco minutos para que la sémola se infle.  Pasado este tiempo trabajamos la sémola con un tenedor o las manos para deshacer los grumos. Yo le pongo un poquito de aceite para que este trabajo resulte más sencillo.

Reservamos el cuscús.

Picamos la cebolla, el perejil y la menta finamente. Picamos el tomate en daditos.  

Incorporamos la cebolla, el perejil, la menta y el tomate al cuscús y los mezclamos. Añadimos el zumo de limón y el aceite y volvemos a mezclar. 

Salpimentamos al gusto y dejamos reposar en un lugar fresco al menos dos horas para que la sémola integre los sabores.

Es un plato diferente con un sabor muy rico, disfrutadlo.



miércoles, 14 de agosto de 2024

DE ROSA



No es la primera vez que hablo en el blog de Ana, la novia de mi hijo, para contaros alguna receta que hemos elaborado juntas. Pero hoy es diferente.
Hace unos meses una compañera de clase, de cuando estudió Panadería y Repostería en el instituto Peñacastillo, le comentó que iba a abrir un horno artesano con cafetería y que le gustaría que trabajase en el proyecto. A Ana esto le hizo mucha ilusión porque si hay algo que le gusta de su trabajo es el experimentar y crear cosas nuevas, jugar con las recetas para mejorarlas o simplemente darles un toque personal.

El 25 de julio, en el pueblecito de Liencres a unos diez kilómetros de Santander (Cantabria), su compañera Rosa abrió ese horno artesano en el que ha puesto toda su entusiasmo. Así que el día de Santiago fuimos a la inauguración y allí conocimos a Rosa, su marido y sus hijos, todos muy implicados en este proyecto que a Rosa le hace tan feliz. El lugar en el que se ubican la cafetería y el horno artesano es el antiguo Bar Eloy, cuyo local pertenece a la familia y tiene una excelente terraza donde sentarse a degustar los estupendos productos que salen del horno y a tomar un café, de esos con aroma y cuerpo, que se huele desde la calle. 

Lo cierto es que el día de la inauguración, debido a la gran afluencia de gente, poco se pudo disfrutar del local y de lo que éste ofrecía; probamos una napolitana rellena de chocolate  que la verdad estaba muy rica, con un hojaldre delicado y abundante chocolate de relleno. No sólo realizan productos de repostería sino también panes y empanadas, estas últimas con diferentes rellenos: bonito con tomate, cebolla caramelizada con queso de cabra y de las famosas albóndigas del Bar Eloy, que elabora la misma cocinera que tenían en el bar.




En el collage podéis ver el interior de la cafetería con todos los productos que elaboran. Las pastas son muy finas y de sabor intenso, las napolitanas, a las que ya he hecho referencia, deliciosas, los panes, con miga, para poder disfrutar de las salsas y que además se mantienen sin endurecerse ni revenirse, no sólo el día del horneado, sino también el siguiente, lo cual es mucho mérito con la humedad que hay en Santander. 





El otro día estuvimos con más tranquilidad mi marido y yo y sentados en la terraza pudimos disfrutar no sólo de la estupenda mañana que hacía, sino también de esta riquísima empanada de albóndigas, su masa que no se rompe cuando partes un trocito  y  permite gracias a su ligereza y finura saborear el relleno que no se pierde en la masa como pasa en numerosas ocasiones.





Al igual que la empanada, el hojaldre del croissant es ligero, con sabor a mantequilla y no se desmiga cuando lo cortas para comerlo. Estaba delicioso.

Así que si tenéis un rato, algo que celebrar o simplemente queréis paladear algo rico y hecho con mucho amor, acercaos donde Rosa y catad aquello que más os llame la atención. Dicen que la tarta de queso está riquísima, habrá que probarla.




domingo, 11 de agosto de 2024

LASAGNA FRÍA DE SALMÓN, CALABACÍN, TOMATE Y QUESO

 



Esta receta la vi en la página de Cocina Fácil y me llamó la atención tanto por su sencillez en la preparación como por los ingredientes que usaba. Además no es necesario hornearla y en estos días de tanto calor se agradece poder hacer platos muy ricos sin horno.

NECESITAMOS (para tres lasagnas)

- 12 placas para lasagna.

- Un calabacín.

- Un puerro.

- Un pimiento rojo.

- Dos tomates, yo usé los de rama.

- 200 gr. de salmón ahumado.

- Queso fresco, yo utilicé un queso de Burgos.

- Leche.

- Harina.

- Aceite.

- Pimienta.

- Mayonesa.

- Sal.


LO HACEMOS

Ponemos a cocer las placas de lasagna con agua y sal. Una vez cocidas las dejamos en un paño de cocina para que se vayan enfriando.

Mientras las placas se cuecen picamos el puerro, el pimiento y el calabacín en juliana. En una sartén con un poco de aceite pochamos el puerro y cuando empiece a hacerse añadimos el calabacín y el pimiento. Salpimentamos y cocinamos a fuego fuerte para que queden hechos pero no pierdan la textura, aproximadamente cinco minutos. Cuando ya estén  en su punto añadimos un par de cucharadas de harina y la leche necesaria para hacer una bechamel ligera, que de cuerpo a la mezcla de verduras. Reservamos.

Partimos los tomates y el queso en rodajas y reservamos.

Montamos las lasagnas. 

En un plato ponemos una placa de lasagna y sobre ella un par de cucharadas de verduras. Tapamos con una  segunda placa y sobre ésta disponemos unas rodajas de tomate, queso y salmón al gusto. Tomamos la tercera placa y colocamos sobre ella otro par de cucharadas de verduras. Por último, cubrimos con la cuarta placa, sobre la que incorporaremos una capa de mayonesa que adornaremos con unos taquitos de tomate, salmón picado y eneldo.

Hacemos lo mismo con el resto de las placas y montamos nuestras lasagnas.

Si queréis tomarla más fresquita podéis meterla un ratito en la nevera. Ya veréis qué rica está,


martes, 18 de junio de 2024

TARTAR DE SALMÓN A MI MANERA


Hace unos  días tuve ganas de preparar un tartar de salmón con mango. Empecé a buscar recetas pero no encontré ninguna, al salmón siempre se le ponía aguacate. Así que decidía  que lo haría a mi manera y así también daba salida a unas perlas de ajo negro que había por la nevera. 
El resultado fue el que veis.


NECESITAMOS (para dos tartares)

- Un mango.

- Diez langostinos cocidos.

- Un aguacate.

- Salmón ahumado.

- Unas perlas de ajo negro.

- Salsa de soja.

- Aceite de oliva virgen extra.

- Un aro de emplatar.


LO HACEMOS

Picamos en cuadraditos el mango y el aguacate y en trocitos medianos el salmón y los langostinos.

Montamos el tartar. 

Como base ponemos la cantidad de mango a nuestro gusto, sobre este la mitad de los langostinos y aderezamos con un chorrito de salsa de soja. 

Cubrimos los langostinos con cuidado con la mitad del aguacate que aliñamos con un poquito de aceite de oliva virgen extra y sobre el aguacate disponemos el salmón al gusto. Coronamos nuestro tartar con una cucharilla de perlas de ajo negro.

Espero que lo disfrutéis tanto como yo.

viernes, 26 de abril de 2024

CHAMPIÑONES CON MIEL



Cuando vi esta receta en la página de Cocina Fácil lo que más me llamó la atención fue que se trataba de una receta de más de 2000 años, eso quería decir que se comía en la antigua Roma. En aquel momento supe que no podía dejar de hacerles. 
Lo cierto es que resulta sorprendente lo bien que combinan los champiñones con la miel.

NECESITAMOS

- Una bandeja de champiñones.
- 3 cucharadas de miel.
- Un ajo.
- Una guindilla .
- 3 cucharadas de aceite.
- Perejil.
- Sal.

LO HACEMOS

Limpiamos los champiñones y les quitamos el tallo. Los secamos. Si son pequeños podemos dejarlos tal cual, si son grandes podemos partirlos por la mitad o en cuatro partes.
Reservamos.

Ponemos el aceite en una sartén y salteamos a fuego suave el ajo pelado y cortado en láminas. Cuando comience a tomar color añadimos la guindilla y los champiñones. Salamos al gusto y los cocinamos durante un par de minutos. 

Pasado este tiempo añadimos la miel a los champiñones y dejamos que se acaben de ablandar removiéndoles para que se caramelicen ligeramente.

Servimos los champiñones espolvoreados con el perejil picado.

miércoles, 20 de marzo de 2024

PAPAS RELLENAS



Cuando Ana, la novia de mi hijo, tiene un momento libre aprovecho para meterme con ella en la cocina y aprender algún plato nuevo de su tierra, Perú. En esta ocasión hicimos estas riquísimas papas rellenas y digo riquísimas por que no quedó ninguna. 

 NECESITAMOS

- 1kg de patatas blancas, más o menos del mismo tamaño.
- Harina.
- Un huevo.

Para el relleno de las papas:
- 1/2kg de carne de ternera desmenuzada (estofada o cocida).
- 2 huevos.
- 1 cebolla roja.
- Perejil fresco.
- 2 dientes de ajo. 
- Pimienta. 
- Comino.
- 2 tomates pera.
- Ají panca en pasta.
-100gr de pasas.
- Un par de cacitos de caldo de pollo o agua.
- Aceite.
- Sal.

Para la salsa tártara:
- 2 huevo.
-Aceite de girasol.
- Pimienta.
-Sal
-Mostaza
-1 lima.

Para la ensalada:
- 2 cebollas rojas.
- Perejil.
- 2 pimientos ají.
- 1 lima

Hervimos la patatas una media hora, ya que nos interesa que queden muy cocidas para poder hacer con ellas una pasta. Cocemos tres huevos junto con las patatas durante ocho minutos.

Mientras tanto preparamos el relleno. Para ello picamos una cebolla en brunoise y cuatro o cinco ramitas de perejil con un poco tallo muy finamente.
En una sartén ponemos aceite, dejamos calentar un poco y añadimos la cebolla, los ajos prensados, la pimienta negra y un poco de comino. Dejamos hacer hasta que la cebolla empiece a caramelizarse. Añadimos el  tomate picado en cuadraditos (también podemos poner dos o tres cucharadas de pasta de tomate) , sal, un par de cucharadas de ají y cocinamos unos tres minutos. Incorporamos la carne y la  mezclamos bien  con la cebolla y el tomate. Añadimos las pasas, dejamos hacer un poco e incorporamos el caldo de pollo poco a poco, sólo para hidratar la mezcla. Cocinar entre 10 y 15 minutos. Corregir de sal, añadir el perejil picado y  dos de los huevos cocidos partidos en trocitos. Dejar enfriar.

Pelar las patatas cocidas cuando aún estén calientes, prensarlas o pasarlas por el pasapuré para obtener un puré que nos permita  manipularlo sin deshacerse. Extenderlo sobre un papel de film y dejar enfriar.

Para la salsa tártara hacemos una  mahonesa y le añadimos media cucharada de mostaza, pimienta y el zumo de medio limón. Volvemos a batir otra vez. Rallamos uno de los huevos cocidos y picamos muy fino unas hojas de perejil, añadimos todo a la mahonesa. Podemos poner un poco más de limón si lo consideramos necesario.

Para la ensalada picamos la otra cebolla en pluma y la dejamos reposar 5 minutos en un recipiente con agua. Después la enjuagamos tres veces. Cortamos el perejil y el ají muy fino, mezclamos con la cebolla y aliñamos con el zumo de la lima al gusto.

Ponemos a la patata que ya se habrá enfriado sal y pimienta y mezclamos. Formamos bolas del tamaño de la palma de la mano,  las aplastamos con la mano de forma que podamos poner sobre ellas un par de cucharadas o tres del relleno y las cerramos con mucho cuidado de que queden selladas.
Freímos las papas. Batimos un huevo y ponemos en harina en un plato. Pasamos una papa rellena por huevo, luego por harina y otra vez huevo y harina y freímos en aceite caliente con mucho cuidado de que no se nos rompan. Sacamos cuando estén doradas.
Emplatamos con la salsa tártara y la ensalada de cebolla que hemos hecho,

viernes, 2 de febrero de 2024

LENGUA DE CERDO ESTOFADA

 


La lengua de cerdo no es una carne que se coma en Cantabria, pero mi suegra que era de Salamanca la cocinaba siempre que la encontraba en el mercado o en alguna carnicería. La forma en que la guisaba era muy sencilla y lo mejor es que no hay pasarse la mañana metido en la cocina. Eso sí, dentro de su sencillez es deliciosa, el olor que desprende cuando se guisa es de ¡¡¡¡qué ricooooo!!!!


NECESITAMOS (para cuatro personas)

- Tres lenguas de cerdo.

- Dos cebollas.

- Vino blanco.

- Aceite de oliva.

- Agua.

- Sal y pimienta.


LO HACEMOS

Picamos la cebolla en juliana. En una cazuela ponemos aceite suficiente para que cubra el fondo, calentamos, añadimos la cebolla y la dejamos pochar a fuego suave.

Mientras se va haciendo la cebolla salpimentamos las lenguas y las reservamos.

Cuando la cebolla esté en su punto añadimos las lenguas y las hacemos un poquito en el aceite y el jugo que haya soltado la cebolla, añadimos un chorrito de vino blanco y tapamos para que se consuma el alcohol.

Una vez que el vino ha intensificado su aroma y sabor de las lenguas, añadimos el agua suficiente para cubrir dos tercios del conjunto. Salamos y dejamos cocer a fuego suave al menos una hora. 

Cuando podamos pinchar las lenguas con un tenedor estarán cocidas y podremos partirlas a lo ancho en rodajas no muy gruesas. Después las volvemos a añadir a la salsa y las damos un hervor para que se impregnen del aroma y sabor de la salsa.

Es importante controlar que el guiso no se quede seco y añadir agua y corregir de sal si es necesario.

Es fundamental un buen pan para mojar la salsa y... a disfrutar


viernes, 5 de enero de 2024

TALLER DE COCINA DEL NEOLÍTICO





 

El pasado mes de noviembre la Asociación de Amigos del Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria (AAMUPAC) llevó a cabo su tradicional taller de cocina, este año dedicado a la alimentación  en el Neolítico.

Los cereales han sido el fundamento de nuestra alimentación desde la Prehistoria reciente, de ellos obteníamos y obtenemos la energía diaria y no sólo ha sido la base de diversos tipos de panes sino que su versatilidad les hace ser principio de numerosas preparaciones no solo sólidas, sino también diversas bebidas alcohólicas como la cerveza, que generalmente se hace con cebada.

Entre los diversos cereales encontramos la espelta, a la que se considera el cereal más antiguo y presenta un gran contenido en minerales y tiene menos gluten que el trigo, el cereal más consumido en el mundo y que se remonta a unos 12.000 años. Otros tipos de cereal son el arroz, el khorosan propio de Oriente Próximo, el maíz en América, el centeno, la cebada, la avena o el mijo.


Lo primero que elaboramos esa mañana fue el pan. El Matzo y el Missi Roti son los dos tipos de pan que hicimos. El primero también conocido como pan ázimo, se preparaba en la Pascua judía y lo realizamos con harina de cebada; el segundo con harina de garbanzo y sí, se lo que estáis pensando que el garbanzo no es un cereal pero no podemos olvidar que esta harina también conocida como harina chana es muy importante en la cocina de la India, Bangladés, Birmania...

                                               Matzo


                                            Missi Roti


Después fue una Baba Ganoush hecha con tahina y berenjenas. La tahina se elabora con sésamo, una semilla de origen indio y africano de color entre blanco cremoso y negro. La tahina es una salsa tradicional de la cocina de Oriente Medio.

                                                        Baba Ganoush


Los cereales sirven para elaborar platos de carne o pescado como fue el caso de estos buñuelos de mejillones cuya masa llevaba harina de trigo y cerveza que acompañamos con una salsa de nueces, vinagre, pan de molde mojado en agua y escurrido, ajo machado, sal y aceite que removimos hasta obtener una textura del tipo de la mahonesa.

                                            Midye tava


Continuamos nuestro viaje culinario hacia Oriente Próximo con un delicioso Tabboulé cuya base es el trigo bulgur, un trigo cocido, puesto a secar y machacado. También es posible encontrarlo de otros cereales como el arroz, la espelta o la cebada. 

                                            Tabboulé


Nuestro recorrido por los platos con cereales lo finalizamos con un guiso de maíz cubano. El maíz es un cereal de la familia de las gramíneas, rico en almidón y no contiene gluten. Fue el cereal fundamental para las civilizaciones maya y azteca, siendo consumido en México ya hace 7.000 años. Colón lo introdujo en España siendo conocido entonces con el nombre de panizo.

                                           Guiso de maíz cubano

Finalizamos nuestro ágape con un arroz con leche, un postre de siempre que gustan tanto a los mayores como a los jóvenes.
Espero que os haya gustado nuestro recorrido por el cereal. 
Hasta la próxima.