miércoles, 8 de mayo de 2013

TOMATES VERDES FRITOS



Gracias a todos por pasar por mi cocina. Si veis el marcador dice que he superado las cien mil visitas y eso para mi ya es todo un logro. Habéis venido todas esas veces a curiosear mis fogones y a darme vuestra opinión sobre mis platos. Gracias, gracias y muchiiiiiiiisimas gracias,de corazón.

Tomates verdes fritos...eso suena más a película que a plato y es que si yo tengo una auténtica debilidad, exceptuando a mi familia, es el cine. Me encanta desde muy pequeña y, si es verdad que ahora ya no dispongo del tiempo de antes para ver películas y que el precio de una entrada de cine está por las nubes,  no he perdido la afición. Me apunto enseguida a la sexta 3, la Paramount y miro en el teletexto todas las cadenas para ver si en alguna ponen algo que merezca la pena ser visto.

Cuando se estrenó Tomates verdes fritos yo no sabía que existiera una variedad de tomate para freír; mucho menos que fuera un plato muy apreciado en el sur de los EE.UU., ni había leído la novela de Fannie   Flagg.

Hoy todo ello está solucionado y hasta me atrevo a hacer este delicioso plato que en el sur de Estados Unidos acompañan con salsa remoulade y langostinos. La salsa remoulade tiene un sabor muy fuerte, si la queréis más suave ponedle menos mostaza.

La receta está tomada de los libros de Cocinas del Mundo que publicó el diario El Mundo, del número 26 dedicado a Estados Unidos.


NECESITAMOS (para cuatro personas):

- 3 tomates verdes maduros.
- 12 langostinos.
- 2 huevos.
- Harina.
- Una pizca de pimienta negra.
- Una pizca de cayena o pimentón.
- Orégano, tomillo y sal.

 Para salsa:

- Zumo de un cuarto de limón.
- Un octavo de cebolleta.
- Medio diente de ajo.
- Una cucharada de mostaza.
- Dos cucharadas de ketchup.
- Una cucharadita de apio picado.
- Una pizca de pimienta blanca y otra de pimienta negra.


LO HACEMOS:

Ponemos el pimienta, el pimentón, el orégano, el tomillo y la sal en la harina con la que vamos  a rebozar los tomates y reservamos.

Lavamos los tomates y los cortamos en rodajas de unos cinco centímetros. Los pasamos por la harina y el huevo y los freímos en abundante aceite caliente. Sacamos de la sartén y ponemos en un papel de cocina.

Se pelan los langostinos, se salan y se pasan por la sartén con un poco de aceite, que tomen color.

Para la salsa.

Picamos finamente la cebolleta, el ajo y el apio y lo mezclamos todos bien en un bol con el resto de los ingredientes.

Montamos el plato. 

Sobre los tomates colocamos un langostino y un poco de salsa. Si os apetece podéis poner unas lechugas variadas que acompañen el plato y le den un poco de color.